En algunas ocasiones, puede suceder que el frenillo labial no se desarrolle de forma adecuada.
¿Qué hay que hacer en estos casos? ¿Qué síntomas nos avisan de que el frenillo no está evolucionando cómo debería? ¡Te resolvemos todas las dudas en este artículo!
¿Qué es frenillo labial?
El frenillo labial es un tejido que conecta la encía con el labio. Existen dos de ellos: el superior y el inferior, siendo el de arriba el más grande.
Es una parte de nuestra boca a la que normalmente no prestamos mucha atención, pero también debemos cuidarla como hacemos con los dientes y las encías.
El frenillo suele comportar problemas de gravedad, pero, en ocasiones, es necesario hacer una pequeña intervención para corregirlo.
¿Cuándo hay que operar el frenillo?
En los bebés y niños de edades tempranas, el frenillo no solo conecta el labio con la encía, sino que, además, se extiende hasta el paladar. Con el paso de los años, el frenillo se desplaza y deja de estar conectado con el paladar.
Pero, sin embargo, no siempre evoluciona como debería. Aveces, puede presentar un grosor superior al habitual, posicionándose entre los dos incisivos centrales. Esta situación es conocida como frenillo labial hipertrófico.
Esto puede provocar la aparición de diastemas o la imposibilidad de mover el labio superior con normalidad.
En estos casos, el dentista evaluará la posibilidad de practicar una cirugía con el fin de reducir el grosor del frenillo. Para ello, se tendrá en cuenta la edad del paciente y las patologías asociadas.
Ven a nuestra clínica dental en Argés
Si crees que tu hijo puede tener frenillo labial hipertrófico o presenta parte de la sintomatología anteriormente descrita, no dudes en visitarnos en nuestra clínica dental en Argés.
Puedes ponerte en contacto con nosotros en los teléfonos 925 21 37 44 (Toledo) y 925 29 37 25 (Argés).